“El poseer no existe, existe solamente el ser: ese ser que aspira hasta el último aliento, hasta la asfixia”
Entradas más populares de este blog
Libro: "Cinco Secretos" Autor: Gian Franco Huacache
—Creo que hay una gran diferencia entre estar enamorada y estar verdadera y perdidamente enamorada de alguien —dijo ella. —¿Y cuál es la diferencia? —le pregunté. —Que estando enamorada, una a veces puede buscar excusas para no salir con su chico. Ya sabes, quieras o no, en algunas ocasiones las salidas tienden a agotarnos. Ahora... Eso no significa que no te quieran. Simplemente hay personas así. Pero... —se detuvo por un momento— ¡Vamos! Cuando uno está en verdad, jodidamente enamorada de alguien, esas razones no existen. Más bien sacamos excusas de cualquier parte, solo para ver más tiempo y de cualquier manera a esa persona que amamos. —Ya veo —le dije—. Supongo entonces que el tiempo que uno pasa al lado de alguien es importante. —¿Importante? ¿El tiempo? ¡Dios mío! —se rió Layla —cuando una está enamorada el tiempo ni siquiera existe. Los enamorados se vuelven como dos borrachos dormidos en la acera. Solo la resaca de tanto amor nos puede despertar.
POPEYE SÍ EXISTIÓ...
Frank Rocky Fiegel, inspiración de Popeye, fue un marinero polaco asentado en Illinois, que andaba enredado en peleas y grescas. Conocido por su descomunal fuerza, hizo correr a contrincantes mucho más grandes. También es recordado por su buen corazón y cariño hacia los niños. Elzie Crisler Segar (vecino suyo), creó el personaje en 1919 en una tira cómica del periódico New York Journal, inmortalizando a este sujeto. Por su aspecto, se le bautizó Pop-Eye (ojo saltón). Olivia fue inspirada en una mujer real llamada Dora Paskel, mientras que Blutus, se inspiró en un grandulón que llegó al puerto donde estaba Franz Fiegel, y peleó con él... ganando Popeye ante la incredulidad de todos los espectadores.
Comentarios
Publicar un comentario